domingo, 21 de julio de 2013

Naturaleza protegida.

Entre Usted y yo... ¿Naturaleza protegida?

Yo entiendo por Naturaleza, hoy en día, todo aquel espacio, que aún no ha sido poblado por el hombre. Naturaleza protegida, lo podemos definir, como aquel espacio que ha sido “protegido” por el hombre. Y es que el hombre, se toma muchas licencias, a la hora de “proteger” la Naturaleza.

No voy a negar, que la acción del hombre, protegiendo animales y plantas en peligro de extinción, haya salvado a muchas especies, y seguramente, salvará a otras muchas... Pero lo cierto es, que, durante millones de años, el ecosistema formado por el mundo animal y el mundo vegetal, ha estado evolucionando continuamente, sin que el hombre, que también formaba parte de él, como especie animal que es, influyera demasiado en su evolución. A través del tiempo, se forma una selección natural de las especies, que la naturaleza misma, cree que deben de sobrevivir.

Hasta qué punto, puede o debe el hombre, alterar dicho ecosistema, decidiendo qué especies debe de proteger para que subsistan, si la propia naturaleza ha decidido ya, que no deben sobrevivir... Proteger a una determinada especie, puede poner en peligro a otra especie, que a su vez, al extinguirse, puede dejar en peligro a otras especies, actuando así, como una reacción en cadena que altere irremediablemente el devenir de muchas otras especies, que sí que tenían el beneplácito de la naturaleza, para seguir con su evolución...

Por supuesto que, prefiero a alguien que se preocupa por la naturaleza, que a alguien que derriba montes, destruyendo así el hogar de muchos animales. Prefiero a un ecologista empedernido, que a un cazador aficionado... Pero mi conclusión, es que, prefiero ser neutral, y limitarme a observar y convivir con la naturaleza, sin intentar protegerla, y por supuesto sin destruirla, dejando que ésta siga el cauce normal que marque su evolución, sin intentar influenciar, ni para bien, ni para mal, en dicha evolución...

Deberíamos ser conscientes, de que, por nuestro modo de vida, ya no formamos parte de ése mundo animal que intentamos “proteger”, y me refiero al hombre civilizado, porque las tribus de aborígenes ó tercermundistas, sí que respetan ese mundo, y conviven con él, formando parte de dicho ecosistema, obteniendo de él lo que necesitan para subsistir, y sólo lo que necesitan, influyendo en él de una manera natural.

Y el más claro ejemplo que se me ocurre, viene avalado por lo que opinaron ciertos expertos en la materia, sobre lo que aconteció en el parque natural de Yellowstone. Normalmente nos tiramos de los pelos si se quema un monte, y pensamos que es una desgracia, pero nada más lejos de la realidad, ya que algunos incendios, por supuesto no me refiero a los provocados por el hombre, se producen de forma natural. En el caso del incendio acontecido en Yellowstone, fue por la cantidad de árboles caídos, que ya estaban muertos, y que seguían allí en el suelo, porque nadie los había quitado, se produjo un incendio de forma natural, quemándose una gran parte del parque... Muchos pensaron que había sido una catástrofe, pero los expertos coincidieron en que había sido algo necesario, y el tiempo volvió a poblar sus montes de árboles.

Fue un proceso completamente natural, lo que demuestra, que la naturaleza es mayor de edad, y sabe cuidarse por sí misma sin la “ayuda” del hombre.